Durante una de estas visitas, los chicos escucharon atentamente las explicaciones sobre los orígenes de estos lugares, el original y titánico esfuerzo de picadores y terreras para su construcción, su valiosa finalidad, su estructura, cuidados y mantenimiento hasta nuestros días. Para todos los niños, con edades comprendidas entre 7 y 11 años, ha sido una vivencia muy enriquecedora sobre la que preguntaron numerosas cuestiones que les iban surgiendo sobre la marcha.

Todos coincidieron en que ésta debe ser una actividad que debe formar parte del programa de actividades escolares durante el curso, dada la importancia y valía de algo tan importante en la historia de Tomelloso y sin embargo lamentablemente desconocida para todos ellos. Como dato curioso, fueron contando el número de lumbreras desde la Biblioteca hasta la cueva visitada en la calle Persiles y se asombraron que fueron casi cuarenta las encontradas en este recorrido.

Finalmente, el último día del taller todos ellos fueron exponiendo ante la Concejal de Cultura, Nazaret Rodrigo, micrófono en mano, lo que para ellos ha constituido esta divertida experiencia estival de la Biblioteca donde la oratoria ha ocupado un papel estelar, junto a otras disciplinas como la lectura compartida, la ilustración y la informática, para recibir a continuación el diploma que les acredita como unos muy buenos alumnos en las citadas materias, pero resaltando en especial la excelente amistad que se establece entre todos ellos y que a partir de estos talleres se mantiene el resto del año.