El público se agolpó en las calles del polígono 20 para disfrutar los fuegos artificiales que duraron alrededor de veinte minutos. Numerosas personas recogieron el mágico momento con sus móviles, se oyeron los típicos gritos de admiración cuando los cohetes dibujaban sus formas más espectaculares en el cielo y se respiró ese buen ambiente de ilusión y alegría de la primera noche  de feria. Como siempre, la pólvora la presenciaron niños, adultos, personas mayores…nadie quiso perdérsela.

Poco a poco fueron subiendo los decibelios de una pólvora, hasta que los cohetes más sonoros anunciaron que había concluido. Al público le gustó tanto que se quedó con ganas de más fuegos artificiales, pero todas las cosas tienen su final. Poco a poco los asistentes fueron llegando al recinto ferial para disfrutar  de las espectaculares atracciones, reponer fuerzas en las tascas o presenciar el primer espectáculo de los Jardines del Parque que protagonizaron Adrián Osuna y Javier Quiralte.