Hogares de los que no nos olvidamos y a los que el arraigo y preocupación nos mantiene unidos y unidas. En estos días más que nunca. Personalmente, es muy doloroso observar desde la lejanía (casi obligada por las pocas oportunidades a las que podemos optar los jóvenes en una ciudad grande como es Tomelloso) las vivencias personales y cercanas tan dolorosas que nos ha traído este virus que nadie ha podido evitar; pero más doloroso es si cabe observar que las personas responsables de mejorar la situación no lo están haciendo. 

En estos días, los líderes políticos de Tomelloso han decidido dedicarse palabras en los medios de comunicación locales. Y lo han hecho escribiendo artículos de opinión, que lejos de dirigirse a la mejora de la situación, lo único que ha hecho es demostrar que el juicio político es la medida más popular dentro de las filas de los partidos locales. Palabras que vuelan de un tablero a otro como si de dardos se trataran, pensando que la diana es el equipo contrario cuando la única ofensa recae sobre la inteligencia de los ciudadanos y ciudadanas de Tomelloso, tratando de que nos quedemos conformes con su lluvia de acusaciones. 

Igual que los jóvenes son el sector más afectado en muchos ámbitos a día de hoy, cuentan ustedes en Tomelloso con una juventud perfectamente preparada. Jóvenes inteligentes, trabajadores y críticos y que en gran parte están en primera línea de batalla trabajando día a día para sacar a nuestra ciudad adelante. Y no solo jóvenes, desde el repartidor que apura estos días para mantener su empleo, la enfermera que está en riesgo diario, hasta el anciano en una residencia consciente de lo que significa la enfermedad para las personas de su edad alojadas en un sitio como este. 

Personas a las que, espero, no les vale que tengan en su argumentario poco más que el reproche y que no miren al mundo para entender que esta es una crisis que afecta a todos, sino para que nuestro sufirimiento se convierta en su traducción política, llena de sentimentalización, exhibición y dramatización. Donde entra todo esto, finaliza la opción de hacer política. Porque no pueden pretender que ésta solo sea autárquica y responda a sus propias leyes, pensando más en su posición que en los ciudadanos y ciudadanas. 

Incidiendo en la preparación y experiencia de los jóvenes de Tomelloso, este sería un buen momento para reflexionar y repensar nuestra implicación en la vida política local y cuál queremos que sea el futuro de nuestra ciudad. Nuestro papel es ahora más importante que nunca.