La pervivencia de la Constitución de 1978 depende de la capacidad de todos los representantes institucionales para unirse desde la tolerancia y el respeto al otro en la tarea de “mantener un país en el que todos quepamos en condiciones dignas”, ha asegurado la delegada de la Junta de Comunidades en Ciudad Real, Carmen Teresa Olmedo, en el discurso que ha pronunciado esta mañana en el acto institucional para conmemorar el 42º aniversario de la Carta Magna.

Olmedo ha señalado que la fórmula para construir ese país para todos, en el que nadie se sienta excluido, pasa por el desarrollo y aplicación de los derechos contemplados en el capítulo tercero del Título Primero de la Constitución, que recoge los principios rectores de la política social y económica como los relativos al progreso social y económico y la distribución de la renta regional y personal más equitativa, al derecho a disfrutar del medio ambiente y el deber de conservarlo, al disfrute de una vivienda digna y adecuada o a la necesidad de garantizar la suficiencia económica de la ciudadanía durante la tercera edad.

Al lado de la plasmación de estos derechos, la representante del Ejecutivo de García-Page en la provincia ha puesto el deber de todos los representantes de las instituciones de trabajar desde la lealtad para encontrar puntos de encuentro porque “son más las cosas que nos unen que las que nos separan. A este respecto, ha recordado que, como decía el presidente Barreda, “hay que acostumbrarse a convivir con la tensión constitucional que implica la unidad y la diversidad, sin dramatizar y sin rebasar los límites de la propia Carta Magna”.

Carmen Olmedo ha iniciado su intervención aludiendo a las particularidades especiales de la conmemoración de este año a causa de la COVID-19 para, acto seguido, subrayar lo que ha supuesto la Constitución para España, ya que, bajo su amparo, hemos conseguido “las mayores cotas de libertad e igualdad y el periodo más largo de convivencia pacífica de nuestra historia”.

Y ello a pesar de que “la situación en 1978 no ayudaba al optimismo, pero “prevaleció el sentido de Estado y, sobre todo, el afán de reconciliación de unas personas que no querían perder, de ninguna manera, el tren de la Democracia”, un logro que los que nacimos y crecimos ya en un régimen de libertades debemos reconocer, fruto de la “enorme dosis de generosidad de muchas personas que fueron capaces de acordar un texto que consolidara nuestra recién recuperada democracia”.

Igualmente, la delegada de la Junta de Comunidades ha recordado que Castilla-La Mancha debe su existencia como Comunidad Autónoma a la Constitución del 78, que ha permitido “demostrarnos a nosotros mismos y al resto del país que no somos menos que nadie y que estamos plenamente capacitados para ejercer nuestra autonomía: solo por eso hemos de celebrar una Carta Magna que nos ha dado la oportunidad de creer en esta tierra y en sus gentes”, ha afirmado.

De ahí que Olmedo haya dicho que “hoy es un día para manifestar el orgullo que sentimos por ser españoles y por estar arropados por esta bandera que une nuestra tierra” y para reivindicar “la igualdad de oportunidades de derechos y libertades, así como la unión de nuestro país, respetando esa diversidad que nos enriquece, pero sin escisiones”.

A este respecto, la representante del Ejecutivo regional ha reiterado del peligro que supone la corriente de intransigencia que recorre el mundo y de recuperar actitudes y gestos de otros tiempos en los que “con la excusa de salvarnos, llevaron a este país a la oscuridad, a la división, a la falta de respeto de la voluntad de los españoles y españolas”, todo lo contrario a lo que dice el preámbulo de nuestra Ley de Leyes, que habla de “consolidar un Estado de Derecho que asegure el imperio de la ley como expresión de la voluntad popular”.

Acto institucional

La delegada de la Junta de Comunidades ha pronunciado su discurso en el acto institucional que cada año celebran conjuntamente el Ayuntamiento de Ciudad Real, la Subdelegación del Gobierno, la Diputación Provincial y la Delegación del Gobierno de Castilla-La Mancha en la provincia y que este año ha tenido lugar en el Museo de la Merced, acto que, como es tradicional, ha comenzado con el izado de la enseña nacional.