Echo la vista atrás y me recorre un escalofrío al recordar esos primeros meses de pandemia, y como esta se cebó tan cruelmente con nuestra ciudad. Fueron días muy difíciles, de noticias inciertas, de no saber qué hacer, de confinarse en casa teniendo incluso que cerrar nuestros negocios, y lo peor, de ver como compañeros y amigos nos dejaban de forma repentina por este maldito Covid. Eso ha sido sin duda lo más duro, y para lo que menos preparado puede estar nunca nadie. Vaya desde aquí mi homenaje, mi reconocimiento y mi afecto para todos ellos y para sus familias.  

Como dije en más de una ocasión, Tomelloso no hizo ni dejó de hacer nada para merecer tanto castigo, fue sólo, a mi entender, una cuestión de suerte, de muy mala suerte. Menos cuestión de azar fué el ver como muchos medios, incluso instituciones, hacían leña del árbol caído con reportajes y declaraciones que dañaban nuestra imagen, queriendo dar incluso a entender que efectivamente había algo que estábamos haciendo muy mal y que la situación si era en cierto modo merecida. A todos ellos, me gustaría decirles que seguimos aquí, que vengan a conocernos, porque desde luego no nos conocían cuando hablaban así. Que vean como se han adaptado nuestros negocios, como se ha impuesto el teletrabajo en tiempo récord incluso en empresas en las que parecía imposible, que vean como nuestro comercio y nuestra hostelería han invertido para cuidar a sus clientes y evitar contagios, que conozcan a nuestros agricultores que se dejaron la piel después de sus ya agotadoras jornadas de trabajo para mantener nuestra ciudad limpia y desinfectada. Que descubran en definitiva a nuestras gentes, que con unión y responsabilidad, estamos consiguiendo que Tomelloso sea una de las ciudades con menos contagios de nuestro entorno. 

En lo que respecta a la asociación, no dudes que hemos dado el máximo para intentar estar más cerca que nunca de tí, tanto con los distintos proyectos que se han ido poniendo en marcha, como defendiendo vuestros intereses ante las diferentes instituciones reclamando las ayudas que el escenario requería. Esperamos haber estado a la altura, y para el próximo año, seguiremos aquí para ti, para todo lo que necesites. 

El año próximo será seguro mejor para todos, sobre todo porque el listón de este 2020 ha quedado muy bajo, pero también porque estoy convencido de que esos aprendizajes de los que hablaba antes, nos servirán para tomar impulso y crear nuevas metas por las que seguir luchando, por las que seguir ilusionándonos, y ese es sin duda el mejor motivo para seguir adelante, y para honrar a los que ya no están. 

¡Gracias, un abrazo y Feliz Año Nuevo! ¡¡Viva Tomelloso!!