Desde la declaración en riesgo de la Masa de Agua Subterránea en diciembre de 2014 se han ido limitando las extracciones para regadío mediante la asignación de dotaciones máximas en función del cultivo implantado. 

Del año 2014 al 2019 las dotaciones fueron estables de 1500 m3/ha para cultivos leñosos y 2000 para cultivos herbáceos. En la campaña de 2020 estas cantidades se redujeron un 10%, y en esta nueva campaña, estas cantidades se vuelven a ver afectadas con otra bajada del 10% con respecto al año anterior. Por lo tanto, para el 2021 el régimen anual de explotación que se aplicaría sería de 1350 m3/ha para cultivos leñosos y 1800m3/ha para cultivos herbáceos. 

La organización agraria ya manifestó su desacuerdo con estos recortes, insistiendo en su oposición rotunda. Además, recuerda que Ciudad Real junto a otras provincias de Castilla-La Mancha que pertenecen a la cuenca del Guadiana ya riegan con el 50% de sus derechos, por lo que sus dotaciones son las más bajas de todo el territorio nacional, incrementándole graves dificultades a los agricultores de la zona.