La Consejería de Agricultura de Castilla-La Mancha ha tachado de "irresponsabilidad gravísima" la orden de ayudas a la agricultura ecológica que se publicó en marzo de 2015, con la que "se engañó" a los ciudadanos, y ha asegurado que el Parlamento Europeo "va a investigar lo que ocurrió aquí".

El consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural castellanomanchego, Francisco Martínez Arroyo, ha aportado esta información en su comparecencia en las Cortes con motivo de un debate general solicitado por el PP relativo a las consecuencias de las medidas adoptadas por el Gobierno regional en relación a la agricultura ecológica.

Como consecuencia de este debate se han votado y rechazado dos propuestas de resolución, una presentada por el PP en la que pedía pagar antes del 30 de agosto las ayudas pendientes de 2015, 2016 y 2017, y otra de Podemos, que solicitaba aprobar en 2019, con la autorización de la Comisión Europea y el acuerdo del sector, una nueva convocatoria de ayudas par asegurar la viabilidad de los agricultores ecológicos.

Sin embargo, el consejero de Agricultura ha defendido la labor realizada por el Ejecutivo en esta materia al destacar que en la región hay 8.089 agricultores ecológicos, que cultivan 326.000 hectáreas y ha subrayado que el Programa de Desarrollo Rural 2014-2020 de Castilla-La Mancha reserva 236 millones para la agricultura ecológica, lo que ha motivado que la Comisión Europea les haya felicitado.

En cambio, ha tachado de "irresponsabilidad gravísima" la orden de ayudas a la agricultura ecológica aprobada en marzo de 2015 por el anterior Gobierno regional, pues ha denunciado que en la misma no se establecían los criterios para el reparto de ayudas si las solicitudes superaban el crédito reservad y que, de haberse llevado a cabo, se habrían quedado fuera de las ayudas "muchos agricultores".