La puesta de largo del rastrillo contó con la presencia del concejal de Cultural, Raúl Zatón, y la presidenta de la AECC en Tomelloso, Amalina Martín, incombustible, un torrente de energía y dedicación en esta noble lucha contra una de las enfermedades más terribles a la que, poco a poco, se va haciendo frente.  “Estoy contenta porque año tras año vemos que este rastrillo tradicional se va superando, -manifestó la presidenta-. Si no fuera por el trabajo de las voluntarias y la gente de Tomelloso que nos vuelve a demostrar su generosidad este rastrillo no sería posible. La verdad es que la gente se vuelca, entre otras cosas, porque hay mucho cáncer y todas las familias lo pueden tener más o menos cerca”.

Amalina Martín recordó que  el rastrillo incluye una campaña de recogida de firmas para que se aumenten los fondos económicos destinados a la investigación. “La mayor parte del dinero que se recauda va dirigida a la investigación y ya se están viendo avances importantes. El cáncer antes era una enfermedad que mataba, ahora también hay personas que mueren pero es porque no lo cogen a tiempo y en otras es como una enfermedad crónica que se puede tratar”. Martín rechazó la tesis que dicta que hay más cáncer que nunca. “No es cierto, lo que ocurre es que la gente se muere mucho más tarde  y se detecta mucho más rápido”.

La presidenta de la AECC en Tomelloso  quiso subrayar los servicios que se prestan en Tomelloso como el de la sicóloga “cuyo trabajo con enfermos y famliares costea la Asociación Española contra el Cáncer” o el del masaje linfático que “se presta gracias a un convenio con el centro médico Lamar que permite que las mujeres reciban sin coste alguno este importante servicio”, además de otros como yoga, talleres de manualidades, las clases de sevillanas con Rosa Mercedes, “que nos cobra muy poco”. 

En el rastrillo del año pasado se recaudaron casi cinco mil euros, “una cantidad que esperamos igualar o incluso superar en el de este año. Los precios son muy asequibles y la gente siempre encuentra ese artículo o producto que necesita o gente que no compra nada pero que nos hace una donación”.

Raúl Zatón expresó su satisfacción por la apertura de nuevo rastrillo solidario. “El Ayuntamiento no puede dejar de apoyar una iniciativa como ésta y por este motivo le cedemos de forma gratuita La Posada para este rastrillo, además del convenio anual que firmamos con ellos. Hablamos de una de las asociaciones más importantes de Tomelloso por las actividades que realizan y la lucha que mantienen contra una enfermedad que, por desgracia, todavía sigue ahí en nuestro día a día”. El concejal elogió la altruista labor de las empresas y comercios que donan sus productos.  En la apertura del rastrillo también estuvo presente el portavoz del PP, Javier Navarro y  sus compañeras de grupo Cortes Valentín e Inés Losa, además del concejal de Ciudadanos, Miguel Benito.

Por los pasillos de la planta baja de La Posada había un amplio muestrario de ropa de hombre, mujer y niños; calzado, juguetes, adornos, regalos, artículos de cerámica, libros, películas, música, cuadros, bolsos, maletas, artículos deportivos y muchos productos alimentarios con vinos de todas las bodegas y cooperativas de la ciudad y otros productos que se elaboran en la ciudad. El público se llevó desde primera hora bastantes productos.