En el caso del documento del presunto impostor, hay una foto (de un hombre joven), el nombre completo con el DNI del supuesto sacerdote, en este caso A. F. P., y el encabezado de la secretaría general del Obispado ciudarrealeño que en teoría expidió el carnet en octubre de 2012.

También recoge la capacitación del titular para celebrar la misa, confesar y predicar ante los fieles.

Otra ‘prueba’ es que este hombre “apareció presuntamente en una parroquia de Andalucía para concelebrar y al cura de allí le pareció extraño”, ha comentado Jiménez a este digital.

La supuesta falsificación “nos ha venido de fuera”, ha señalado el sacerdote, a la vez que ha comentado que “entre nosotros nos conocemos” y por ello “tenemos que tener cuidado y avisar de que no es cura”.

¿Víctima?

El caso podría dar una vuelta de tuerca más si la persona que está en la fotografía del carnet fuera a su vez también víctima de otra persona, ya que se da la circunstancia de que el vicario judicial de la Diócesis, Bernardo Torres, publicó una foto de dicho documento este viernes en una red social, en la que advertía del fraude.

“Se hace pasar por sacerdote de nuestra Diócesis. Es una falsificación. Es un timador”, señalaba.

La entrada ha sido compartida más de 200 veces en menos de 24 horas y entre la veintena de comentarios, había uno de ‘Fdez José’, supuestamente el joven de la foto, que escribía “yo solo puedo decir que alguien ha cogido mi foto de un carnaval y han utilizado algunos de mis datos. Pondré una denuncia porque eso no es mío”.

Seguidamente, Torres le respondía “yo me he limitado a poner el dato que nos ha llegado al Obispado. No sé de quién es la foto. Si es suya y le están utilizando, usted verá cómo actuar. Yo me quedo tranquilo con que esto no tendrá repercusión entre los fieles”.

Jiménez ha respaldado este comentario y ha indicado que “si alguien le ha falsificado el carnet u otros datos, nosotros no podemos entrar”.