Pues a media tarde del día de hoy me encuentro en Jerusalén Este, estaba previsto llegar a la cena y dormir, pero hemos llegado como hora y media antes de lo previsto y junto a mis compañeras de Manos Unidas, hemos tenido una fugaz toma de contacto con una realidad muy diferente de la que estamos acostumbrados, mientras esperábamos a que nos recogieran las Monjas que nos acogen,  hemos visitado el Santo Sepulcro punto de referencia para los cristianos, este es uno de los lugares que se visitan cuando se hacen las peregrinaciones a Tierra Santa. A las seis, hora local, nos han recogido las monjas para traernos a su casa de huéspedes y momentos antes de hacerse de noche nos ha enseñado un poco el centro,  es una muy austera casa de huéspedes y también  una guardería.  Hemos podido ver la guardería desde la terraza de la hospedería,  porque es el único punto desde el que se puede ver entera porque lo que es la zona de juegos de la guardería está partida por un altísimo muro de hormigón coronado de concertinas que parte por un lado la parcela donde está este complejo de no más de setecientos metros de planta, también hemos visto una cubierta con estructura metálica que se financió con un proyecto de Manos Unidas que le era imprescindible para que las niñas puedan jugar bajo ella en el trocito de patio que les queda, porque desde el lado Palestino , de vez en cuando llueven piedras mezcladas con cócteles molotov.

Y eso es el entrante,  mañana empezamos con el trabajo.