"El mayor problema es que se confunda a toda Cataluña con quien dice que gobierna Cataluña", ha defendido García-Page, asegurando que no quiere "el conflicto" y que está dispuesto a propiciar el entendimiento y a mejorar las condiciones de la convivencia.

También ha alabado el "esfuerzo" que realizan quienes cambian de territorio, porque nadie deja su tierra "por ganas", y se ha preguntado qué es lo que pasa en un país "que olvida que tiene hoy más españoles viviendo fuera que extranjeros viviendo aquí".

PIDE A PODEMOS ANTEPONER LOS INTERESES DE SUS VOTANTES

De otro lado y ante el fracaso de las negociaciones para desbloquear la investidura de Pedro Sánchez, García-Page ha pedido a Podemos "anteponer los intereses de sus votantes y no jugar a la vieja política", porque la situación "es delicada".

Tal y como ha avisado, "hay mucha gente observando", y "si algo ha quedado claro en las pasadas elecciones es quién tiene que ser el próximo presidente del Gobierno", ante lo que ha alertado del "derroche de energía" que supondría una nueva convocatoria electoral.

Ha lamentado que "la ambición y el reparto de poder" vayan a ser más importantes que "lo que le importa a la gente". "Tiene que haber Gobierno y seguir hablando" para ampliar la confianza de las fuerzas progresistas, ha demandado García-Page, por lo que ha pedido un "ejercicio de responsabilidad" a las partes.

A ese respecto, ha recordado que, a lo largo de la pasada legislatura, en muchos momentos se sintió "traicionado" por Podemos en los acuerdos planteados, pero finalmente se llegó "a un entendimiento" porque se puso por delante el interés general.

Ahora, aunque ha resaltado que tiene "mayoría absoluta" en este mandato, se va a esforzar en llegar a acuerdos "con todos los partidos políticos", si bien ha aclarado también que tiene "muy claro" con quién no se va a entender "nunca". Por ello, ha pedido "a Pablo Iglesias" no ir a otras elecciones para "dar una segunda oportunidad a Vox y a la extrema derecha".