El equipo blanquiazul quería y no podía. No llegó a tener profundidad y no llegó a conectar entre líneas. En parte, porque Javi Sánchez decidió hacer una serie de experimentos. Por un lado, puso a Carlos Martínez de central y jugó con la versatilidad de sus jugadores en la parte de arriba. En el segundo tiempo, Carlos García y el mismo Carlos Martínez hicieron las veces de centrales con un Dani Cabezuelo que alternó la zaga con el lateral. 

En el primer tiempo, un par de centros de Fran Minaya que atrapó bien Rodri y que no encontró rematador por poco, fue todo el peligro blanquiazul. Sin embargo, el Villacañas, a seis para el descanso, abrió el marcador con un testarazo de Gonchi para poner el 0-1.

En el segundo tiempo, con un dibujo bien distinto, Dani Homet fue el que lo intentó a los tres minutos de la reanudación con un fuerte disparo que despejó a córner Rodri. A partir de ahí, el Villarrubia lo intentaba sin encontrar la fórmula para establecer la igualada. 

Al final, victoria del Villacañas que se mostró serio y correoso ante un Villarrubia que tiene mucho que mejorar y que está en pleno proceso de hacerlo. El tomellosero, Loren Molinero, jugó de titular y con su trabajo se está ganando la confianza del técnico Fernando Lominchar.