Llegados al último puerto, el Formac Villarrubia pondrá fin a ese inicio exigente recibiendo al Melilla, una especie de búnker al norte de África que, desde la sombra, está llamado a asaltar la Segunda División, y para ello, ha hecho un proyecto ambicioso con el general Aloisio como jefe de mandos. 

El Melilla hizo pleno en las tres primeras jornadas. Nueve de nueve. Sin embargo, antes del parón, cayó en Mérida para demostrar que en fútbol dos más dos no son cuatro. Quizá llegue herido a este partido y con ganas de resarcirse. Por eso, Aloisio ha titulado este encuentro como “un partido para ponerse el mono de trabajo”. Y es que jugar en el Nuevo Campo, sin gente, es mucho más fácil para el rival y, por qué no, para el colegiado. A pesar de ello, los pupilos de Javi Sánchez tienen bien memorizadas sus pautas de trabajo, los automatismos y todo lo que hay que hacer para lograr el botín de la victoria. Por eso, el primero en ponerse el mono de trabajo es el Formac Villarrubia, ataviado, además, con esa capacidad de sufrimiento que hace que las victorias sepan mejor. 

Para la cita, Javi Sánchez no podrá contar con Iván Gutiérrez por problemas musculares, mientras que el resto estará disponible en un once que puede presentar novedades. 

“En el Nuevo Campo da igual el rival que venga. Solo nos vale ganar”, aseguraba el técnico en la previa del encuentro. “La semana ha ido bien. Confío plenamente en todos los jugadores y en nuestro trabajo diario. Va a ser un partido difícil, como todos. El Melilla es un equipo llamado a estar entre los tres primeros y vendrá con ganas de resarcirse de la última derrota, pero no hay que olvidar que vienen de hacer tres de tres en las tres primeras jornadas. La intensidad y esa balanza entre los errores y los aciertos, marcarán el devenir del partido”, subrayaba Javi Sánchez. 

El encuentro arrancará este domingo a las 12 de la mañana y será retransmitido en directo por CMM Play. Una vez más, el encuentro será a puerta cerrada y será dirigido por el andaluz Morales Moreno.