Allá por los años 80 fue José Luis Llorente el encargado de sacar adelante una liga de fútbol-sala prácticamente sin medios,  mediante el método científico más viejo de la historia (acierto-error), porque nunca se había hecho algo así en Tomelloso. Sin embargo fueron unos años de romanticismo puro, donde existía una estrecha colaboración y cooperación de los equipos con el presidente.  No digo que esto no haya sido una tónica durante todos los años, desde el primero al último, pero me refiero a que había más interés en solventar las dificultades para que la liga pudiera seguir adelante que en el criterio de querer  ganar a toda costa, como más adelante sucederá.

Posteriormente y tras una asamblea de equipos celebrada en las antiguas oficinas del Patronato Municipal de Deportes situadas en la calle Concordia, cuando ya había tres categorías diferentes y alrededor de 60 equipos, con árbitros organizados como un colectivo diferenciado de los deportistas y entrenadores, Paco Culebras al frente de una pequeña junta directiva en las que estaban Vicente Navarro y José Luis Zatón, dio un paso al frente y se compromete  para organizar la liga de fútbol-sala, aunque los problemas con los que se iba a encontrar eran otros. La competición ya estaba implantada y los equipos demandaban otras mejoras: que los carteles estuvieran repartidos lo más rápidamente posible para saber los horarios, las clasificaciones y las sanciones; que los vestuarios y las instalaciones deportivas estuvieran en óptimas condiciones. Todos los equipos deseaban jugar el máximo de partidos en los pabellones. Fue una época de consolidación donde aparecen en su máximo esplendor los maratones y los fichajes de jugadores.

En los años 90 y sustituyendo a Paco Culebras es Jesús Gallardo el nuevo responsable de la competición.  Había sido el coordinador del colectivo arbitral, estando continuamente colaborando para el buen desarrollo de la competición hasta que se erige como encargado de la liga y del colectivo arbitral. Mantiene una fórmula de éxito modernizando y mejorando en todos los aspectos, aparece una categoría más, organizada para las AMPAS que se juega el domingo por la mañana en los pabellones, tuvo que hacer frente al aumento de clubes federados que utilizaban los pabellones a muy diversas horas y al cambio de jornadas y partidos por parte de las federaciones. 

Y por último tomando el relevo de Jesús Gallardo y, hasta hace unos meses, el responsable de la liga fue Pedro Granados recientemente fallecido que, con la ayuda de Tomas, estuvieron al frente de la liga avanzando en la modernización a través de aplicaciones web y aplicaciones móviles. Con Pedro se incluyó un pabellón más en las instalaciones que la liga podía utilizar, jugando todos los partidos a cubierto, además de continuar con los maratones.

Cuatro presidentes, cuatro épocas diferentes de la Liga Local de Tomelloso, que tuvieron el denominador común de la entrega desmedida por un deporte amater que batió records de participación. Los cuatro, y todos sus colaboradores, merecen el reconocimiento de todos.