El panadero se muestra muy contento por haber logrado «el primer puesto en un campeonato en el que participan muchos países». “Bread In The City” es una de las competiciones internacionales más importantes, lo que vendría a ser una copa del mundo. España se batió contra ocho selecciones «Portugal, Italia, China, Croacia, Israel, Perú, México y Países Bajos».

El certamen consistió «en una prueba en la que tuvimos que hacer distintas elaboraciones de panadería, bollería, pastelería y salado en un tiempo determinado».  Es uno de los certámenes «más difíciles» que conoce el maestro panadero. «Estamos muy contentos y felices porque es la primera vez que la Selección Española de Panadería obtiene un pódium en un campeonato tan prestigioso». Y que la medalla de oro haya llegado «cuando la panadería artesana está sufriendo tanto con el aumento de los costes, es una gran noticia dentro de las malas que está recibiendo nuestro sector».

Como “Los Espigas” se bautizó a la Selección Nacional de Panadería Artesana Española que se creó en el año 2015 impulsada por CEOPPAN (Confederación Española de Panadería, Pastelería, Bollería y Afines) con el objetivo de poner en valor la panadería artesana y tradicional como gran referente del sector.

Asegura Sánchez que el jurado internacional, formado por cuatro personas de distintos continentes, «valoró la prueba en su conjunto, no solo puntúa una elaboración, todas ellas suman para la nota final». Así, “Los Espigas” quedaron «a dos puntos por delante del segundo clasificado, Italia, y con cinco de ventaja sobre el tercero, China». Y, además, la Selección Española obtuvo el premio especial a la Mejor Elaboración que fue, como poco, espectacular, «si algo identifica a la selección es su creatividad. No se trata solo de elaborar un producto, sino de vender una experiencia. Queremos destacar por la innovación, por darle un toque diferente a “Los Espigas”».

“La panadería es más pasión que otra cosa”

Fueron a Rímini formando parte de la Selección Española «dos entrenadores, el cordobés José Joaquín Roldán que también es el seleccionador, y yo que soy el director técnico; el asturiano Samuel Suárez, un gran panadero también, y Daniel Flecha, que es de León». Para preparar un campeonato de este tipo «tardamos un año. Tenemos reuniones en las que valoramos las bases de los campeonatos a los que nos vamos a presentar y elegimos muy bien la estrategia que vamos a seguir y la elaboraciones que vamos a llevar a cabo». Una vez que todo está bien definido «empezamos a hacer entrenamientos a seis meses vista del campeonato. No solemos reunir en algún centro de formación durante cuatro o seis días cada vez, en jornadas maratonianas de 16 horas. Hay muchas horas de trabajo en un campeonato de este tipo». Asegura Jesús Sánchez que «es más pasión que otra cosa, abandonamos nuestra familia y nuestro trabajo, pero compensa porque hacemos lo que más nos gusta».

Dice Jesús Sánchez que se siente afortunado por pertenecer a “Los Espigas” «porque nos sirve como laboratorio de I+D+i. Investigamos y hacemos muchas cosas nuevas y la industria está pendiente de nuestras elaboraciones. Nuestra empresa, Sánchez Panaderos Artesanos, también se beneficia de este conocimiento». No ha dejado de formarse nuestro interlocutor en las dos décadas que lleva al frente de su panadería «y me moriré aprendiendo». Enfatiza Sánchez que «en los últimos diez años ha habido una revolución por la que se identifica una panadería artesana y de calidad de una industrial. Claramente ha habido en España una evolución, tal vez no estemos como otros países, Francia por ejemplo, pero si que poco a poco se va haciendo más cultura del pan y el consumidor lo valora y lo paga».