Y respondió Almarcha a ese calor que le dio el público con un conciertazo, empezó por tangos, concretamente ese Tango de las Vinalias que incluye en su álbum “Alejandra” y terminó por bulerías, tocando también por malagueñas, seguiriyas, tarantas y otros palos del flamenco en los que demostró su virtuosismo con la guitarra a la que lleva a terrenos casi imposibles en increíbles escalas, arpegios, maravillosos punteos y esos rasgueos frenéticos con los que culminaba cada tema. Flamenco del bueno en el que el guitarrista también se aplicó en la percusión para dar mayor realce al ritmo y compás de cada de tema. El público quedó asombrado por lo que veía y fue muy generoso en sus ovaciones. Lástima los problemas de sonido que irrumpieron en la parte final del concierto que, afortunadamente, fue solucionando el bueno de Miguel Ángel Jiménez al que el guitarrista agradeció su gran colaboración.

Fue un auténtico lujo disfrutar con un artista que consiguió la Licenciatura en Guitarra Flamenca en el Conservatorio Superior de Música en 2009 y que ha estudiado con maestros de reconocido prestigio internacional como Paco Serrano, Manolo Franco o el Niño de Pura. Su completa formación, su extenso recorrido artístico, y su incansable búsqueda le han permitido desarrollar un lenguaje propio y personal del instrumento, destacando su técnica impecable. Almarcha es compositor habitual e intérprete para prestigiosas compañías de danza, como las de Olga Pericet y Marco Flores (ambos han sido los Premios Max de la Danza de 2020); y para otros solistas como Antonio Canales, Sara Calero o José Manuel Álvarez. Después de la excelente acogida de su primer trabajo discográfico, Vejézate, publica su siguiente álbum a principios de 2021: Alejandra que tendría gran protagonismo en el concierto que ofreció ante sus paisanos en Tomelloso.