Este año se ha superado el millar de participantes. Tomelloso Throwdown cuenta con atletas procedentes de toda España, e incluso del extranjero. Exigentes ejercicios ponen a prueba la capacidad física de los atletas, con la presión de crono y los ánimos de un público que no deja de alentar a los participantes.

El crossfit se caracteriza por incluir movimientos de gimnasia olímpica, para mejorar la flexibilidad y el control de fuerza y peso corporal; levantamiento de pesas olímpicas, que permiten  desarrollar una alta potencia y ejercicios cardiovasculares que trabajan la capacidad cardiaca y pulmonar. Esfuerzos que se llevan al límite y que exigen una gran preparacion para soportar la dureza de los ejercicios. No hay más que ver como algunos atletas se tiraban al suelo nada más terminar.

La lluvia ha hecho acto de presencia al final de la mañana, afectando a los atletas que trabajaban en el campo Miguel Moreno.

A la competición, que está siendo espectacular y la sigue numeroso público, se añade su vocación solidaria e inclusiva. Este año, los fondos se destinarán a AFAS (Asociación de Familiares y Amigos de Personas con Discapacidad) y AFANION (Asociación de Familias de Niños con Cáncer de Castilla-La Mancha), dos entidades con una importante labor social en la región. Además, la organización no descarta ampliar las ayudas a otras entidades como la Fundación Pequeño Deseo, en función de la recaudación final.

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