Así lo ha acordado el Comité Ejecutivo Regional de la organización agraria tras reunirse en Toledo para evaluar el impacto de los conejos en los cultivos. Según ASAJA CLM, los planes coordinados de control puestos en marcha por el Gobierno regional no han conseguido reducir la sobrepoblación en ninguna de las zonas afectadas. “Llevamos años con los mismos parches y los agricultores siguen pagando las consecuencias”, denuncia la organización.

ASAJA reclama que el control de la especie se realice de forma continua, sin limitaciones estacionales ni restricciones en los métodos de captura, y defiende el uso libre de herramientas como hurones y escopetas. A su juicio, el problema requiere una respuesta similar a la que se ha aplicado en el caso del jabalí, con medidas excepcionales, persistentes y sin trabas burocráticas.

La organización también ha pedido que se complemente la caza con actuaciones preventivas como vallados, protectores, eliminación de majanos o incluso el uso de métodos químicos y neurológicos para reducir la población de forma eficaz.

Por último, ASAJA Castilla-La Mancha ha instado a la Consejería de Desarrollo Sostenible a que asuma en exclusiva la gestión del problema y adopte decisiones firmes para resolver un conflicto que califican de “grave y creciente”, con importantes consecuencias económicas y sociales para el campo de la región.