las terreras de rompe y rasga

sacaron la tierra de las entrañas.

Ellas vistieron al pueblo

con pespuntes y una vieja máquina

encorvaron el cuerpo, cegaron el alma. 

Ellas  cada mañana,

desde su tierna infancia

supieron de labor y de labranza.

Vosotras, las nietas del pueblo

las que tuvisteis enseñanza

y sabéis de letras y tablas.

Cuidaréis de las abuelas del pueblo

de sus males y sus traumas

médica, enfermera que sana.

Estudiaréis el folklore del pueblo

sus fiestas, alegrías y chanzas

y cantaréis al oído melódicas nanas.

Velaréis por la tranquilidad del pueblo

apagaréis fuegos, mantendréis la calma

y plantaréis árboles verde esperanza.

Llenaréis de ciencia y cultura al pueblo

de estudio y de palabra,

sí vosotras, la generación del mañana.

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