El festival sirvió además para culminar los actos de un año especialmente significativo, marcado por la celebración del 60 aniversario del grupo, una efeméride que ha puesto de relieve su trayectoria y su compromiso con la cultura popular.

Un encuentro entre generaciones del folklore

En esta edición participaron los grupos infantil y adulto de los anfitriones, que compartieron escenario con antiguos componentes del colectivo. Esta reunión intergeneracional permitió recuperar voces, bailes y melodías que forman parte de la historia cultural de Tomelloso, reforzando la idea de continuidad y pertenencia en torno al folklore local.

La Ronda Alcucera, invitada de excepción

Como agrupación invitada actuó la Ronda Alcucera, procedente de La Roda (Albacete) y reconocida por su labor de divulgación del folklore rodense y manchego. Su actuación aportó variedad y autenticidad a una edición que reafirma el papel del festival como punto de encuentro entre tradiciones de toda la región.