La Voz de Tomelloso les ha contado a lo largo del año  los logros y gestas de  tres deportistas de élite de la ciudad: el triatleta, Antonio Benito; la atleta, Alicia Berzosa y la patinadora, Inmaculada García. Con los tres hemos hablado para recapitular lo que fue el 2025, preguntarles cómo viven la Navidad y con qué retos y objetivos empiezan el nuevo año.

Antonio Benito, sigue instalado en la élite y vivió un año 2025 con éxitos importantes. Instalado en la élite del triatlón desde hace años, Benito volvió a sacar ese gen competitivo en las grandes citas.  Si hay un logro que saborea especialmente “es el campeonato del mundo de larga distancia que se celebró en Pontevedra, algo que fue muy especial porque lo pude festejar junto a mi pareja y familia. Era un gran logro y, además, en casa, con lo que fue muy especial  También me hizo muy feliz ese segundo puesto en el Ironman de Texas donde había gente muy importante y me sentí realmente bien desde el inicio al final de la prueba”.

Antonio Benito asegura que le gusta mucho la Navidad. “Ya desde segundo de bachiller me tuve que marchar de casa a la Residencia Joaquín Blume, y cuando te alejas del hogar, parece que se acentúan más las ganas y esos sentimientos de querer estar con los tuyos. Después de una larga temporadas de viajes y competiciones en tantos lugares, estar unos días en casa con la familia es algo que me llena mucho”. El triatleta se queda con  “esos momentos de ver películas en casa y estar más tranquilo, aunque sigo entrenando duro porque hay competiciones a la vuelta de la esquina. La Navidad la divido entre la familia y los duros entrenamientos”. 

El año nuevo ya no estará en Tomelloso, Antonio Benito,  porque el 26 vuelve a subir a Lugo, “de ahí que intente aprovechar al máximo la estancia junto a los míos”.

Acerca de la comida, que tan presente está en la Navidad, Antonio Benito intenta mantener los hábitos alimenticios de un deportista de élite, si bien reconoce que “me encanta la comida casera que me hace mi madre, especialmente los postres que le salen riquísimos. En realidad, el año es muy largo y tiempo habrá para poner las cosas en su lugar.  Ahora toca disfrutar de las fiestas y de compartir comidas con los tuyos, con cuidado, pero tampoco sin obsesionarse en exceso”.

Al año 2026 le pide ante todo salud “ sobre todos, para librarnos de las temidas lesiones y tener esa continuidad de entrenamientos que es lo que hace que lleguen luego los resultados. También le pido disponer de algo más de tiempo para poder pasar más tiempo en Tomelloso con los míos, que es algo muy importante para mí. Esos momentos que estoy junto a la familia, los disfruto mucho”.

Otro año brillante para Alicia Berzosa

Alicia Berzosa despide el año con la serenidad que da el trabajo bien hecho y con la ambición intacta. Con la madurez y claridad de ideas que lleva siempre en su mochila, la atleta tomellosera reconoce que, si tuviera que elegir un logro de la temporada,” me quedaría con la actuación en el Campeonato del Mundo Universitario, donde conseguí mi mejor marca personal en los 10.000 metros, y además subí al podio con la camiseta de la selección española para colgarme un bronce que guarda un significado especial”. Para Berzosa, aquella carrera fue una demostración de madurez deportiva y de satisfacción personal por la forma en la que supo competir. La medalla también tiene el valor de ser la única que tiene la selección española en esta distancia y, además, le supuso colocarse primera en el ranking español de 2025 en los diez mil metros.

La Navidad, sin embargo, no siempre es sinónimo de desconexión total para una deportista de alto nivel como Alicia. La fondista explica que suele vivir estas fechas “rodeada de mi familia, aprovechando para hacer esos planes que la rutina del día a día no permite”. No obstante, matiza “que cada Navidad es distinta y está muy condicionada por el calendario deportivo. En esta ocasión, con competiciones muy cercanas al final de las fiestas, las celebraciones estarán, inevitablemente, muy condicionadas por los entrenamientos, el descanso y el cuidado físico”.

En cuanto a la alimentación, tan presente en estas entrañables fechas, Berzosa asegura que no necesita hacer grandes esfuerzos extra durante estos días.  “Cuido lo que como, claro, pero es algo que forma parte de mi rutina habitual durante todo el año, hasta el punto de que  resulta algo natural”. Para ella, alimentarse bien no significa solo evitar excesos, “sino también asegurarme de ingerir la cantidad necesaria para soportar la carga de entrenamientos que mantengo, incluso en estas fechas”. Berzosa defiende el equilibrio como aspecto clave. “Si en algún momento apetece algo distinto, puedo disfrutarlo sin culpa, sabiendo que la base de mi dieta sigue siendo saludable”.

Con la vista puesta en el futuro más inmediato, la atleta tomellosera afronta el nuevo año con una petición clara y sencilla. Más allá de marcas y medallas, Berzosa desea salud para ella y para su familia. “Solo así podré seguir haciendo lo que más me apasiona: entrenar, competir y avanzar paso a paso en el cumplimiento de los objetivos marcados”.

Inmaculada García: muchos entrenamientos y preparando exámenes

La patinadora, Inmaculada García, que atesora numerosos éxitos nacionales e internacionales en el patinaje, modalidad Inline Freestyle, compagina el deporte con sus estudios de Enfermería en Toledo. A la hora de analizar los resultados obtenidos en el año 2025 asegura que “no ha sido mi mejor temporada, aún así pude conseguir algún logro importante como ese campeonato de España del que me siento muy orgullosa. Había mucho nivel y pude ganarlo”.

Estas fechas navideñas no  conllevan relajación para Inmaculada García, más bien todo lo contrario. “Mis estudios de enfermería en Toledo me tienen muy ocupada porque a la vuelta de las vacaciones me esperan exámenes finales. Por tanto, tengo que aprovechar estos días para estudiar a tope y llegar lo más preparada posible. Pero tampoco puedo descuidar el patinaje porque ahora tenemos un parón en lo que a competiciones se refiere y hay que aprovechar para mejorar la técnica y subir el nivel para las competiciones que regresarán en el mes de febrero”.

La patinadora no tiene que hacer grandes esfuerzos para esta época de grandes comidas. “Mi familia no tiene por costumbre llevar a cabo copiosas comidas en Navidad, y por tanto, no tengo que hacer mucho sacrificio en ese sentido, porque no hay una diferencia excesiva con el régimen de comidas del resto del año”.

Al 2026 que está a punto de comenzar, Inmaculada García, le pide que “sea un año lleno de experiencias, tanto en lo personal como en lo deportivo, y sobre todo, seguir mejorando. No le pido ganar algo en concreto, simplemente poder seguir en la alta competición para seguir mejorando mi nivel técnico”.

A pesar del mucho tiempo que le ocupan entrenamiento y estudios, Inmaculada García, saborea al máximo esos momentos que puede estar en estas fechas tan entrañables con su familia, amigas y amigos.