En el año que acaba, la actividad cultural en Tomelloso fue incesante en muchos ámbitos. Nuestros artistas, algunos de ellos muy jóvenes, volvieron a llevar a cabo un derroche de talento, creatividad y trabajo que no pasó desapercibido para La Voz. Nuestro medio sigue prestando una especial atención al trabajo de los creadores que trabajan para emocionarnos con sus obras y magistrales interpretaciones de la realidad.

El Coro de la AMAO estrenaba el 10 de febrero la ópera Boheme, producida por Novaria Artist y representada en el Teatro Coliseum de la Gran Vía madrileña. El Coro participaría también en el reconocido Festival Medinaceli Lírico ofreciendo una emocionante interpretación de la ópera Madama Butterfly de Giacomo Puccini. 

Los grupos de teatro locales siguieron elevando el nivel en el 2025. Así, Pan pa hoy cosechaba un gran triunfo con la representación de la obra de Delibes “Cinco horas con Mario”, mientras que Carpe Diem conseguía cinco nominaciones a los premios Juan Mayorga con “La habitación del niño”. Saúl Berzosa, con solo 11 años, se alzaba con el galardón al Mejor Actor de Reparto. Carpe Diem se llevaría igualmente cinco premios en el Certamen de Aceuchal con “Lady Violet”. Por su parte, Platea despedía en casa su aclamada gira con “La duda”

En un gesto de amor por la ciudad que le viera nacer, el poeta y ensayista Dionisio Cañas formalizó la donación de su valioso legado bibliográfico y documental al Ayuntamiento de Tomelloso, con una contribución única que enriquecerá el patrimonio cultural de la ciudad, y cuyo contenido se supondrá un nuevo espacio de referencia para investigadores, estudiosos y amantes de la literatura. El legado pasará a formar parte del nuevo centro cultural “Casa de las Letras y las Artes”, bajo el nombre de “Colección Dionisio Cañas y José Olivio Jiménez”, en homenaje a su compañero y crítico literario. También se confirmaba que la obra de otro gran creador, José Luis Cabañas, se expondrá de manera permanente en Tomelloso.

En el campo de la literatura, otra excelente poeta, Ágata Navalón, presentaba con éxito “La piscina del Oeste” ;  la joven Marta Boronat protagonizaba una de las grandes noticias al ganar el II Premio Ana Santos Payán con “Infundio (cuentos del coco)” que tuvo una gran acogida y Pilar Valentín alumbraba nuevo libro, “Festival marino, solidario y divertido” que aseguraba deberle al mar y los niños. Y hubo más. La joven Inés de Limburg Stirum presentaba su poemario “Contando las olas”, el debut literario de una autora que sorprendió al público por su madurez poética y su sensibilidad, mientras que Javier Grande presentaba el libro “Al sur de Marlene”. Por su parte, Javier Ruiz se llevaba el premio de Periodismo del Certamen Cultural Virgen de las Viñas por su artículo, “La Tierra Santa de Tomelloso”- El año que acaba vio nacer otro certamen literario; el Barrio San José Obrero convocaba el I Certamen Nacional de Poesía Narciso Rodrigo que tuvo una masiva participación en su estreno.

Protagonista en el 2025 fue también Santi Lara que en abril colgaba en Espacio Cartuja de Granada “Fuego en los pies”, una muestra individual a la que llevó obras de gran formato de reciente producción. Era la primera vez que el reconocido artista tomellosero exponía en Granada. Inolvidable 2025 también para Caroline Culubret que ganaba el primer premio de pintura del Certamen de la Cooperativa. 

Sonia Ruiz Parra y la Sombra del Oso llevaron a Praga la memoria de Félix Grande y su familia. Y hay más nombres propios del año cultural;  el de Mario López Torres que fue de Tomelloso a la alfombra roja del festival de Cannes; el del guitarrista, Adrián Lomas, que llevó el embrujo de Tomelloso a Japón con “Sublime flamenco”, los éxitos del gran José Almarcha; el de la soprano, Alicia Hervás que ofreció su bella voz en escenarios y foros de prestigio como el Teatro Real, Auditorio Nacional, Teatro Quijano de Ciudad Real, Semana de la Zarzuela de La Solana, V Gala Lírica de Socuéllamos o Gala de la Zarzuela de la Feria de Tomelloso, entre otros.

El Marcelo Grande volvió a ser escenario de magníficos espectáculos. El Brujo sedujo, una vez más a Tomelloso, con su genial Lazarillo de Tormes; inolvidable fue el Carmina Burana que majestuosamente interpretó la Coral del Conservatorio que dirige Mariely Blanco con motivo de su treinta aniversario y que llevaría también al Auditorio Nacional.

En otro escenario, el Santuario de Pinilla, albergaría una inolvidable noche de música con la actuación conjunta de la Coral del Conservatorio; la Coral Lux Aeterna y la Banda de la Asociación Santa Cecilia.

Otra agrupación, la Unión Musical Ciudad de Tomelloso, presentó en olor de multitudes un libro que recogía sus veinte años de andadura.  En verano, la tercera edición del Zodiak Festival volvió a desembocar en éxito de público y calidad de los grupos y artistas participantes. A la música siguió aportando mucho y bueno, el pianista Miguel Huertas, que clausuró el Festival de Teatro del Almagro con sus deliciosos “Diálogos de oro”.

No pararon los pintores locales. Anselmo Ponce y Antonio Ortiz Mayorga ofrecieron una interesante exposición conjunta en La Posada; mientras que Pepe Carretero llevaba su universo íntimo al Real Jardín Botánico de Madrid. Semanas después, también se podría disfrutar de su obra en Beat Wines. Manuel Solana vivió un año fructífero al ser premiado en el Certamen Artístico de la Fiesta de las Letras y uno de sus cuadros causaría sensación en la exposición sobre el 450 aniversario de la Parroquia de La Asunción que albergó La Posada.  Y tuvo una gran acogida fue la exposición antológica del recordado Ezequiel Cano en el Museo López Torres.

Tampoco cesaron en su actividad pictórica, Fermín García Sevilla y Ángel Pintado, dos grandes que siguen emocionando a sus incondicionales y Nuria Morales causo sensación con sus “Gorgeos”. El empuje de los nuevos creadores se reflejó igualmente en la actividad del colectivo Al Alimón, en esa frescura que aportó Margen Izquierdo con su propuesta alternativa y poco convencional; en el derroche creativo de los alumnos de la Escuela de Arte y Superior de Diseño “Antonio López, en un formidable trabajo de Rafa Meone que fue imagen de un importante congreso  o en ese magnífico trabajo de murales que los artistas siguen realizando en el Barrio de La Esperanza con Tomás Gutiérrez como cabeza visible de este proyecto.