-¿Qué valoración realiza de la liga que acaba de terminar?

-Creo que está siendo un éxito, por la participación, el comportamiento de los jugadores, los buenos partidos que se han visto, el nivel del arbitraje y el aliciente de contar con un equipo de fuera que también ha sido un aspecto muy positivo

-En la liga hemos visto filosofías diferentes, equipos que han apostado por un bloque de amigos y otros que han reunido plantillas muy competitivas, ¿no cree?

-Se nota mucha la diferencia entre esos equipos que juntan a los amigos para pasárselo bien y esos otros dos o tres equipos que lo hacen de una manera más profesional buscando el resultado por encima de todo y fichando a los mejores jugadores que pueden

-¿Qué cree usted que puede pasar en la final?

-Es difícil de saberlo. Dependerá en buena medida del acierto que tengan en el tiro. Em cualquier caso, será bastante duro y emocionante. Los Simpáticos tienen un equipo fuerte y con la experiencia de haber ganado en años anteriores, mientras que Avebas tiene un equipo con mucha altura que también puede tener sus opciones-

-No hace mucho usted todavía jugaba, ¿echa mucho de menos estar en la cancha?

-Sin duda se echa de menos estar ahí jugando, pero llega un momento en el que cuando los partidos son demasiado profesionales tienes el miedo de que se pueda producir alguna lesión. Existe ese desfase en lo que tu cabeza dice que puedes hacer y lo que el cuerpo está dispuesto a permitirte.