Los asistentes disfrutaron escuchando (y leyendo) una selección de textos premiados en la Fiesta de las Letras y con la música de Inocente Picazo a la Guitarra. Una celebración entrañable y cercana en la que participaron las concejalas Nazareth Rodrigo y Montse Benito además de Antonio Valero en representación de Cruz Roja. Hubo una exposición y venta solidaria de obras de arte gracias a Adela Cabañas, María Abad y Caroline Culubret. Además, Manuel Solana estuvo pintando en directo, vendiendo sus trabajos a beneficio de Cruz Roja. Colaboraron con el encuentro La Librería Espacio Cultural, Tecnocopia, la Biblioteca Municipal, Fina Tafalla y Cruz Roja

Durante la presentación del acto, Encarna Cabañas, manifestó que se celebraba el haber podido y sabido custodiar el certamen literario a través del tiempo. La Fiesta de las Letras nació en 1944 y vino para quedarse. La primera edición se convocó en 1944, la segunda se celebró en 1951, No se convocó 1957 y desde 1958, contó Cabañas, se ha celebrado sin interrupción hasta 2019, edición que presentaron la propia Encarna Cabañas y el actor Álvaro Márquez.

El acto (y las palabras de Cabañas) fueron un homenaje “a todas las personas que han hecho, hacen y harán que el certamen literario ya llamado Fiesta de las Artes y las Letras sea un legado a buen recaudo. Dedicó las lecturas a su padre, primer secretario de la Fiesta de las Letras, “que en torno a la mesa compartía con nosotros aquellos versos y aquellas historias que esperaban nerviosas el escrutinio final”.

Los lectores y lectoras de En Notas Violetas salieron a la palestra (al eterno atril) para hacer el mejor homenaje a la Fiesta de las Letras: leer. La concejala de Cultura, Nazareth Rodrigo, leyó el texto de Francisco Gómez Porro “Una herencia de amor”. Montse Moreno, concejala de Igualdad, dio lectura a las bases de la segunda edición de la Fiesta de las Letras. Antonio Valero, en representación de Cruz Roja, recitó “El pan”, conocido poema de Eladio Cabañero. A continuación, dos autores premiados leyeron sus trabajos. Jesús Lara, premiado en la edición de 1995, leyó “Mi primer viaje a Madrid” y Francisco Navarro, galardonado en 2013, hizo lo propio con “Flamenco”.

Josefina Tafalla, en una grabación, presentó la figura de Francisco Adrados, director de la revista Albores de Espíritu y Santos Moraga leyó “En la ruta del Quijote”, un trabajo periodístico de Adrados premiado en la primera edición de la Fiesta de las Letras.

Encarna Cabañas recitó la “Égloga al tiempo perdido”, de Manuel Alcántara, trabajo premiado en la VIII Edición, la de 1956. “Fuera de renglón”, de Pilar Narvión, fue el texto que leyó Carmen Abad y que fue premiado en la misma edición del certamen. Álvaro Márquez recitó “Estoy oyendo cantar a un mirlo”, poema de Gerardo Diego premiado en 1958. Carlos Torres leyó el poema “Respuesta”, de Félix Grande, galardonado en 1958. “Teléfono y botella de ginebra inglesa” fue el texto de Francisco Umbral premiado en la XI Edición, la de 1961, que leyó Felipe Fuentes. Pilar Morales recitó el poema de Carlos Murciano, “Atardecida”, galardonado en la edición de 1975.

Inocente Picazo puso la música de su guitarra interpretando piezas de Mateo Carcassi y Fernando Sor.