Mondema artesanos se dedica a la restauración y el diseño y fabricación de muebles de todo tipo a medida y elementos decorativos, además de desarrollar una labor divulgativa de la carpintería artesanal, a través de talleres demostrativos, participativos y de juguetes. De hecho, este año la feria les contrató sus conocidos juegos de madera que ocuparon un destacado espacio en la feria y tuvieron una gran aceptación.

“La feria ha tenido más público que ventas, -empieza diciendo Juan Carlos Jiménez-, pero siempre es un escaparate fundamental para las empresas del sector porque hablamos de una de las ferias más importantes del país. Nosotros, a diferencia de otras empresas, no somos de venta directa y buscamos esos contactos que puedan fructificar después en encargos de trabajo”.

El responsable de Mondema subraya la importancia de la promoción y de la imagen. “Es importante que la gente vea lo que haces y eso obliga a estar presente en la feria. Este año les hemos alquilado nuestros juegos a la feria los seis días y nada más que por esto ya nos ha merecido la pena estar”.

Juan Carlos Jiménez comenta también el recinto que ha albergado la feria, el parque de La Vega. “Al ser un espacio al aire libre, te limita un poco, porque son casetas de pequeña dimensiones donde no puedes tener los productos que sí puedes llevar a un recinto cubierto. De este modo, la feria camina hacia stand que muestran productos pequeños, tipo mercadillo. Nosotros al trabajar la madera, echamos de menos un espacio de exposición algo mayor”. Por otro lado, Jiménez considera que el hecho de ser entrada libre “provoca una masiva respuesta de público, pero si se pone un precio, aunque sea simbólico, va la gente que realmente le interesa”.

Analizando la coyuntura por la que atraviesa el sector artesano, Juan Carlos Jiménez asegura que “la situación no es mala ahora mismo. En nuestro caso tenemos bastante trabajo, tanto en Tomelloso como en Madrid.  El problema es la falta de profesionales. La mayoría de los trabajadores que contratan las empresas de artesanía son inmigrantes. Gracias a ellos el sector puede tirar”.

Sobre la ayudas de la administración, reconoce que “hay subvenciones y líneas de ayuda interesantes, pero es tanta la documentación que hay que presentar y los trámites por los que hay que pasar que muchas veces no lo haces, pero esas ayudas están ahí, sobre todo para proyectos basado en la innovación”.