No diré que hayas sido
un año malo,
que en verdad no me diste
ningún mal palo
aunque tuviste,
verdad sincera,
cosas malas y buenas,
como cualquiera.
Has mostrado un sencillo
comportamiento:
fuiste como esas flores
que lleva el viento
que alegran las entrañas
sólo un momento
dando satisfacciones
no duraderas,
importantes algunas,
y hablo de veras,
otras intrascendentes,
de poco peso,
pero hay que conformarse
también con eso.
Mas me tiene contento,
y es lo importante,
que fueras permisivo,
rumbón, galante,
para que conservara
con buen talante,
una prenda que tengo
nueva, flamante,
y que yo, ante las otras,
pongo delante.
Y es que ahora, a mis años,
ya casi un viejo,
escuchando a un amigo
y su consejo,
de una mujer hermosa
he conseguido
su amor y su compaña;
lo he pretendido
cansado de estar solo,
harto, aburrido,
tratando de a mi alma
darle consuelo,
y encontrando la calma
y casi el cielo.
Tú, con tus buenos días,
me has ayudado,
y mi muy caro anhelo
has arropado;
no has dejado que quede
sin su cariño,
y vivo muy contento,
igual que un niño.
Por eso te agradezco
que tú, en tu añada,
feliz me hayas tenido
junto
a mi amada.
{{comentario.contenido}}
"{{comentariohijo.contenido}}"
Miércoles, 17 de Abril del 2024
Sábado, 20 de Abril del 2024
Sábado, 20 de Abril del 2024