La actividad contó con la participación de profesionales sanitarios del propio centro, que se implicaron activamente en el desarrollo del ejercicio. Además, tuvo un marcado carácter externo, al incluir la colaboración de Emergencia Ciudad Real 112, Policía Local y Bomberos.

El ejercicio sirvió para comprobar la efectividad del Plan de Emergencias y Evacuación del centro hospitalario en caso de que exista una situación de riesgo real.

El simulacro comenzó con el hallazgo de un pequeño foco de fuego en una papelera del cuarto de baño de la habitación 201, descubierto por un familiar. Tras la rápida comunicación a enfermería, se activó la alarma y los equipos internos de intervención intentaron sofocar el conato. Sin embargo, al no lograr controlarlo, se puso en marcha el Plan de Autoprotección del Hospital.

El fuego se extendió de manera simulada a las habitaciones 202 y 203, lo que obligó a la evacuación completa de la planta hacia la unidad anexa , gracias a la actuación del Equipo de Emergencias, Alarma y Evacuación (EEAE), compuesto por médicos y personal de enfermería. Mientras tanto, celadores, TCAE y personal de mantenimiento hicieron uso de los sistemas contraincendios disponibles en el área.

Paralelamente, el Centro de Operaciones de Seguridad y el Servicio de Mantenimiento verificaron la situación y notificaron al Jefe de Emergencia, quien, tras evaluar la gravedad, autorizó la activación de medios externos a través del 112 de Ciudad Real y el aviso a la Policía Local.

Finalmente, los Servicios de Extinción de Incendios se hicieron cargo de la emergencia, logrando controlar el incendio en pocos minutos. Una vez asegurada la zona, el hospital recuperó la normalidad, manteniendo en todo momento la continuidad asistencial de los pacientes.

El ejercicio se diseñó cuidadosamente teniendo en cuenta la ubicación, cronología, participantes, plan de comunicación y objetivos. Se eligió la segunda planta de hospitalización como escenario del simulacro, con profesionales voluntarios actuando como usuarios para obtener una doble visión: la del personal en situación de emergencia y la del paciente que requiere ser evacuado.

Previo al simulacro, los equipos de emergencias realizaron varias visitas al hospital para familiarizarse con las instalaciones, además de impartir cursos de manejo de extintores y mangueras a los profesionales del centro.